En estos tiempos se hizo tan popular la lámpara de sal del Himalaya,
que se me ocurrió invitarte a hacer la siguiente meditación a la luz de
ella:
Trata de tomarte 15 minutos o más para vos, en un sitio tranquilo y silencioso.
Siéntate en una silla, delante de la lámpara de sal encendida, con la espalda recta.
Lleva tus manos a la postura Gassho colocándolas juntas a la altura del corazón, para centrar nuestra energía.
Mira su luz olvidándote de todo lo que está a tu alrededor, si en algún momento te distraes, vuelve a concentrarte en ella, en su color, mientras vas sintiendo como su luz va entrando en tu cuerpo y en tu mente.
Ahora sí, cierra tus ojos y siente como su calor entra en tu pecho e inunda todo tu corazón.
Deja que su luz te invada poco a poco y siente como llega al plexo solar (que está tres dedos por encima de tu ombligo).
Si quieres sentir aún más, abre los ojos, obsérvala y vuelve a cerrarlos para mantener su luminosidad con mayor intensidad.
A partir de éste momento, observa como ese color se extiende por todo tu cuerpo, llegando desde los pies hasta la cabeza donde se halla nuestro chakra coronario.
Lentamente fue colmando todas tus células, toda tu energía, todo tu ser.
Detente unos segundos a disfrutar de la sensación de estar llena de luz.
En este estado de paz y tranquilidad total, visualiza a tus seres queridos y a todas aquellas personas con las cuales quieres compartir dicha emoción.
Este es el momento donde estás expandiendo tu consciencia...disfrútalo y para ello tómate un tiempo en total silencio.
Lentamente vamos ir retomando el control, para ello inspira profundo por la nariz y exhala despacio por la boca
Nuevamente, inspira profundo por la nariz y exhala lento por la boca.
Ultima vez, inspira profundo y lentamente exhala por la boca.
Lleva tus manos a los costados del cuerpo y ya es tiempo de ir abriendo los ojos, mientras te quedas observando la luz de la lámpara el tiempo que consideres necesario para luego volver a tus actividades totalmente renovada.
Te aclaro que si no practicas reiki o no sabes nada sobre este médoto natural de armonización, igual la puedes realizar, quizá te gusta y comienzas el camino del reiki, que es tan bello que una vez quer lo inicias no quieres dejarlo nunca más.
Si no me crees, te propongo que hagas la meditación y despues me contás...
Miriam G. de Irigoyen
Reiki Master Satori Shihan
Trata de tomarte 15 minutos o más para vos, en un sitio tranquilo y silencioso.
Siéntate en una silla, delante de la lámpara de sal encendida, con la espalda recta.
Lleva tus manos a la postura Gassho colocándolas juntas a la altura del corazón, para centrar nuestra energía.
Mira su luz olvidándote de todo lo que está a tu alrededor, si en algún momento te distraes, vuelve a concentrarte en ella, en su color, mientras vas sintiendo como su luz va entrando en tu cuerpo y en tu mente.
Ahora sí, cierra tus ojos y siente como su calor entra en tu pecho e inunda todo tu corazón.
Deja que su luz te invada poco a poco y siente como llega al plexo solar (que está tres dedos por encima de tu ombligo).
Si quieres sentir aún más, abre los ojos, obsérvala y vuelve a cerrarlos para mantener su luminosidad con mayor intensidad.
A partir de éste momento, observa como ese color se extiende por todo tu cuerpo, llegando desde los pies hasta la cabeza donde se halla nuestro chakra coronario.
Lentamente fue colmando todas tus células, toda tu energía, todo tu ser.
Detente unos segundos a disfrutar de la sensación de estar llena de luz.
En este estado de paz y tranquilidad total, visualiza a tus seres queridos y a todas aquellas personas con las cuales quieres compartir dicha emoción.
Este es el momento donde estás expandiendo tu consciencia...disfrútalo y para ello tómate un tiempo en total silencio.
Lentamente vamos ir retomando el control, para ello inspira profundo por la nariz y exhala despacio por la boca
Nuevamente, inspira profundo por la nariz y exhala lento por la boca.
Ultima vez, inspira profundo y lentamente exhala por la boca.
Lleva tus manos a los costados del cuerpo y ya es tiempo de ir abriendo los ojos, mientras te quedas observando la luz de la lámpara el tiempo que consideres necesario para luego volver a tus actividades totalmente renovada.
Te aclaro que si no practicas reiki o no sabes nada sobre este médoto natural de armonización, igual la puedes realizar, quizá te gusta y comienzas el camino del reiki, que es tan bello que una vez quer lo inicias no quieres dejarlo nunca más.
Si no me crees, te propongo que hagas la meditación y despues me contás...
Miriam G. de Irigoyen
Reiki Master Satori Shihan