Con los ojos cerrados se se pone la atención en el órgano que queremos trabajar:
1.-HÍGADO: ponga la lengua junto al paladar y con una exhalación lenta y prolongada, produzca el sonido SSHHHHHHHHHHHH. Al mismo tiempo que elimina la rabia, la Ira, la cólera, la agresividad.
Si le viene a la mente en ese momento una situación o persona que le produce rabia, cólera o agresividad, no lo aparte de su mente, sino piense en ello mientras hace el sonido para eliminar la situación o persona de su mundo interior, para transmutarlo.
Durante los periodos de descanso respire hacia el hígado y sonríale al tiempo que lo rodea de una luz verde brillante. Sienta la virtud de la Amabilidad.
2. – CORAZÓN: Con la boca completamente abierta colocando la punta de la lengua detrás de los dientes inferiores haga una exhalación lenta y profunda al tiempo que produce el sonido HAAAAAAAAA y elimina el orgullo, el odio, la soberbia, la impaciencia y la prisa.
Si le viene a la mente en ese momento una situación o persona que le produce esta emociones que está eliminando, no lo aparte de tu mente, sino piense en ello mientras hace el sonido para eliminar el odio, orgullo, etc. de la situación o de la persona. Durante los periodos de descanso respire y sonría al Corazón al tiempo que lo rodea de una luz roja brillante. Sienta la virtud del Amor, y la Felicidad.
3-BAZO: Ponga otra vez la lengua junto al paladar y haga una exhalación lenta y profunda al tiempo que produce el sonido GUUUUUUUUUUU ( desde la garganta como el sonido de “Gemir”) y elimina la preocupación.
Si le viene a la mente en ese momento una situación o persona que le produce preocupación, no lo aparte de su mente, mas bien piense en ello mientras hace el sonido para limpiar la situación o la persona..
Durante los periodos de descanso respire y sonría al Bazo al tiempo que lo rodea de una luz amarilla brillante y siente la virtud de la Belleza que potenciará positivamente este órgano.
4. PULMONES: Con la lengua detrás de los dientes cerrados y con una exhalación lenta y prolongada, producir el sonido SSSSSSS
Hacerlo con la intención de soltar todas las tristezas y depresiones. Si viniera a la mente una situación o recuerdo triste aprovechar para eliminarlo. Este sonido limpia de toda tristeza al pulmón, el órgano donde se guardan esta emociones.
Al inspirar llevar la energía del coraje, del valor y el buen animo a los pulmones. Sonreír y brindarle amor a estos órganos. Conviene visualizarlos envueltos en una luz blanca.
5.- RIÑONES: Formar una O con los labios como si se soplase la vela de cumpleaños y con una exhalación lenta y prolongada emitir el sonido HOOOOOO, al tiempo que se elimina el miedo e inseguridad.
Si le viene a la mente en ese momento una situación o persona que produce miedo e inseguridad, no lo aparte de su mente, sino piense en ello mientras hace el sonido para eliminar el miedo de la situación.
Durante los periodos de descanso respire a los riñones y sonríele mientras le envía una luz azul o negra brillante. Sienta la virtud de la Bondad y Paz.
6.-TRIPLE CALENTADOR: Si es posible haga este ejercicio tumbado. Con la boca abierta exhale lentamente el aire mientas hace el sonido HIIIIIIIIIIIIII. Cuando pare para exhalar, trate de imaginar un rodillo grande que va aplanando el pecho, el estómago y el abdomen, y siéntase vacío ( es como cuando aplastamos con la mano una bolsa de plástico para guardarla. Sonría al triple calentador (no es un órgano).
Esto equilibrará todas la energías activadas por los demás sonidos y relaja el cuerpo en general.
La practica habitual de estos ejercicios depura al organismo de energías negativas, hace prevalecer nuevos y poderosos estados de conciencia de tal forma que se torna cada vez mas improbable caer en tristezas, depresiones, cóleras, miedos, etc.
Un estado de completitud y felicidad se instala, nuestro estado de conciencia original.
Del mismo modo que no podemos vivir sin aire, no puede existir vida humana sin sonido. El hallazgo de los sabios del Asia antigua fue preguntarse cómo el sonido podía ser utilizado para la mejora y evolución del ser humano. La respuesta es que sí, los sonidos curan.
La vida humana se desarrolla en un entorno sonoro: el sonido es connatural a la existencia. La ausencia total de sonido es materialmente imposible. Así, desde el origen de los tiempos, el hombre ha vivido en un entorno repleto de sonidos procedentes de las diversas manifestaciones de la naturaleza: el ulular del viento, el caer de la lluvia, el canto de los pájaros, el crepitar del fuego, el rumor de las olas. Un mundo lleno de armonía que ha conseguido influir física, emocional y mentalmente al ser humano consiguiendo crear estados de relajación, de estimulación o de armonización de la energía vital.
El sonido es la vibración del aire, y así, como la vida humana se da en un medio aeróbico (es decir, en el cual el aire es necesario para vivir), la existencia de sonido es inevitable.
Pero también existe sonido en la vida prenatal.
En el nivel más intimo, el sonido nos ha rodeado y alimentado desde el momento en que fuimos concebidos.
En el instante en que el ovulo se fija en el útero de la madre se pone en contacto con un entorno sonoro: las pulsaciones del latido cardiaco, los ruidos intestinales, la respiración de la madre.
A medida que el feto se desarrolla se da cuenta de la importancia del latido cardiaco que percibe como esencial para su vida dado que la disminución le supone una falta de oxigeno, de nutrición o de temperatura.
Cualquier alteración en el mismo conlleva estados de estrés. El feto no oye el sonido a través del sistema auditivo sino a través de la percepción vibracional o energética.
El sonido es una forma de energía de manera activa en el desarrollo y evolución de la persona.
Así pues, con el sentido pragmático que caracteriza a las culturas asiáticas, los filósofos y sabios chinos e indios pensaron que si el sonido era un elemento constante, omnipresente e inevitable en la existencia humana, podía ser utilizado como medio hábil para su mejora física, mental y espiritual, del mismo modo que el silencio meditativo lo era para los mismos fines.
Extraído de http://www.elgalgolucas.com
1.-HÍGADO: ponga la lengua junto al paladar y con una exhalación lenta y prolongada, produzca el sonido SSHHHHHHHHHHHH. Al mismo tiempo que elimina la rabia, la Ira, la cólera, la agresividad.
Si le viene a la mente en ese momento una situación o persona que le produce rabia, cólera o agresividad, no lo aparte de su mente, sino piense en ello mientras hace el sonido para eliminar la situación o persona de su mundo interior, para transmutarlo.
Durante los periodos de descanso respire hacia el hígado y sonríale al tiempo que lo rodea de una luz verde brillante. Sienta la virtud de la Amabilidad.
2. – CORAZÓN: Con la boca completamente abierta colocando la punta de la lengua detrás de los dientes inferiores haga una exhalación lenta y profunda al tiempo que produce el sonido HAAAAAAAAA y elimina el orgullo, el odio, la soberbia, la impaciencia y la prisa.
Si le viene a la mente en ese momento una situación o persona que le produce esta emociones que está eliminando, no lo aparte de tu mente, sino piense en ello mientras hace el sonido para eliminar el odio, orgullo, etc. de la situación o de la persona. Durante los periodos de descanso respire y sonría al Corazón al tiempo que lo rodea de una luz roja brillante. Sienta la virtud del Amor, y la Felicidad.
3-BAZO: Ponga otra vez la lengua junto al paladar y haga una exhalación lenta y profunda al tiempo que produce el sonido GUUUUUUUUUUU ( desde la garganta como el sonido de “Gemir”) y elimina la preocupación.
Si le viene a la mente en ese momento una situación o persona que le produce preocupación, no lo aparte de su mente, mas bien piense en ello mientras hace el sonido para limpiar la situación o la persona..
Durante los periodos de descanso respire y sonría al Bazo al tiempo que lo rodea de una luz amarilla brillante y siente la virtud de la Belleza que potenciará positivamente este órgano.
4. PULMONES: Con la lengua detrás de los dientes cerrados y con una exhalación lenta y prolongada, producir el sonido SSSSSSS
Hacerlo con la intención de soltar todas las tristezas y depresiones. Si viniera a la mente una situación o recuerdo triste aprovechar para eliminarlo. Este sonido limpia de toda tristeza al pulmón, el órgano donde se guardan esta emociones.
Al inspirar llevar la energía del coraje, del valor y el buen animo a los pulmones. Sonreír y brindarle amor a estos órganos. Conviene visualizarlos envueltos en una luz blanca.
5.- RIÑONES: Formar una O con los labios como si se soplase la vela de cumpleaños y con una exhalación lenta y prolongada emitir el sonido HOOOOOO, al tiempo que se elimina el miedo e inseguridad.
Si le viene a la mente en ese momento una situación o persona que produce miedo e inseguridad, no lo aparte de su mente, sino piense en ello mientras hace el sonido para eliminar el miedo de la situación.
Durante los periodos de descanso respire a los riñones y sonríele mientras le envía una luz azul o negra brillante. Sienta la virtud de la Bondad y Paz.
6.-TRIPLE CALENTADOR: Si es posible haga este ejercicio tumbado. Con la boca abierta exhale lentamente el aire mientas hace el sonido HIIIIIIIIIIIIII. Cuando pare para exhalar, trate de imaginar un rodillo grande que va aplanando el pecho, el estómago y el abdomen, y siéntase vacío ( es como cuando aplastamos con la mano una bolsa de plástico para guardarla. Sonría al triple calentador (no es un órgano).
Esto equilibrará todas la energías activadas por los demás sonidos y relaja el cuerpo en general.
La practica habitual de estos ejercicios depura al organismo de energías negativas, hace prevalecer nuevos y poderosos estados de conciencia de tal forma que se torna cada vez mas improbable caer en tristezas, depresiones, cóleras, miedos, etc.
Un estado de completitud y felicidad se instala, nuestro estado de conciencia original.
Del mismo modo que no podemos vivir sin aire, no puede existir vida humana sin sonido. El hallazgo de los sabios del Asia antigua fue preguntarse cómo el sonido podía ser utilizado para la mejora y evolución del ser humano. La respuesta es que sí, los sonidos curan.
La vida humana se desarrolla en un entorno sonoro: el sonido es connatural a la existencia. La ausencia total de sonido es materialmente imposible. Así, desde el origen de los tiempos, el hombre ha vivido en un entorno repleto de sonidos procedentes de las diversas manifestaciones de la naturaleza: el ulular del viento, el caer de la lluvia, el canto de los pájaros, el crepitar del fuego, el rumor de las olas. Un mundo lleno de armonía que ha conseguido influir física, emocional y mentalmente al ser humano consiguiendo crear estados de relajación, de estimulación o de armonización de la energía vital.
El sonido es la vibración del aire, y así, como la vida humana se da en un medio aeróbico (es decir, en el cual el aire es necesario para vivir), la existencia de sonido es inevitable.
Pero también existe sonido en la vida prenatal.
En el nivel más intimo, el sonido nos ha rodeado y alimentado desde el momento en que fuimos concebidos.
En el instante en que el ovulo se fija en el útero de la madre se pone en contacto con un entorno sonoro: las pulsaciones del latido cardiaco, los ruidos intestinales, la respiración de la madre.
A medida que el feto se desarrolla se da cuenta de la importancia del latido cardiaco que percibe como esencial para su vida dado que la disminución le supone una falta de oxigeno, de nutrición o de temperatura.
El sonido es una forma de energía de manera activa en el desarrollo y evolución de la persona.
Así pues, con el sentido pragmático que caracteriza a las culturas asiáticas, los filósofos y sabios chinos e indios pensaron que si el sonido era un elemento constante, omnipresente e inevitable en la existencia humana, podía ser utilizado como medio hábil para su mejora física, mental y espiritual, del mismo modo que el silencio meditativo lo era para los mismos fines.
Extraído de http://www.elgalgolucas.com